CINE
Roma
Dirección, guión, fotografía y montaje: Alfonso Cuarón
(México/EE.UU., 2018)
135 minutos
Disponible en Netflix
Tras pulir al máximo su caligrafía como cineasta en Hollywood, Alfonso Cuarón volvió a filmar después de 16 años en México, su país natal. Su último opus registrado en tierra azteca había sido la meritoria Y a tu mamá también, y ahora entrega la película más personal y lograda de su carrera. Historia claramente autobiográfica, cuenta su infancia en un barrio de clase media alta del D.F. y homenajea en especial a las nanas, esas empleadas indígenas que fueron, y en gran medida siguen siendo, auténticas segundas madres para los hijos e hijas de las familias mexicanas acomodadas. Bellísimas imágenes en blanco y negro, sabiduría para enhebrar los acontecimientos íntimos con la “Historia” nacional con mayúsculas y actuaciones descollantes –sobre todo de la debutante Yalitza Aparicio y de Marina de Tavira– son algunos de los elementos que hacen de este film uno de los mejores vistos en mucho tiempo. Referenciada en el pasado pero proyectada hacia el futuro, se ocupa con sutileza de las opresiones de clase, de género y étnica. No sorprende que haya barrido con infinidad de premios en cuanta competencia se presentó, incluidos los Oscar a mejor director, mejor largometraje extranjero y mejor fotografía. Parece que razones extra-artísticas, como el resquemor de las majors frente al avance de Netflix, le impidieron ser la primera cinta no hablada en inglés que logra la estatuilla correspondiente a mejor película. Su irrupción plantea un interrogante para el destino de la distribución cinematográfica. ¿Contribuye la obra de Cuarón a que las plataformas online pongan fin a las películas exhibidas en salas? Quizás. Y sería para lamentarlo. Pero la excelsa calidad de Roma está al margen y por encima de estos avatares de la industria cultural.
Carlos Gassmann
